Guarderas

Además de lo anterior, existen dos tipos de guarderas: para plantas de lixiviación y plantas de chancado.En plantas de lixiviación se utilizan guarderas de un solo labio, ya que la presencia de un segundo labio provocaría el atrapamiento de ripios entre ambos labios. Estos ripios al poco tiempo se solidificarían y pasarían a gastar la correa. Por otra parte afortunadamente en las plantas de lixiviación el polvo no es un problema, por lo que un segundo labio tampoco es necesario.En cambio en las plantas de chancado se utilizan guarderas de doble labio. Aquí no existe el problema de endurecimiento del mineral atrapado, pero sí existe un problema de fuga de polvo el cual se disminuye mediante el labio flexible exterior de la guardera.